¿Jugamos al poker para ganar? ¿O para que sepan que hemos ganado?
Cuando uno descubre el fascinante juego del poker, lo primero que le viene a la cabeza es ganar.
Quieres ganar a tus amigos. Quieres ganar a los amigos de tus amigos. Quieres ganar dinero, torneos, fichas. En general quieres ganar hasta en la ducha si te tiraran un par de cartas buenas.
Ahora bien, antes de los seis meses, y si sigues con la ilusión del poker, te das cuenta de que no va a ser fácil. A veces es tu cuenta de juego que esta gafada, otras veces son los jugadores que pagan con cualquier carta. A veces es el bot ruso de turno que te ha clonado la pantalla y está estafándote el dinero, o incluso he llegado a oír que las salas son de un solo empresario que reparte a sus mejores amigos la oportunidad de ser buen jugador, jejejeje.
Si justo en ese momento no abandonas, y decides dar un paso mas en tu sueño, te darás cuenta en seguida, que hay una decisión más difícil todavía que ganar o perder.
La pregunta es: ¿Quiero ganar dinero, o quiero que la gente sepa que he ganado dinero?
Es ahí donde aparece el primer torneo de poker. Hoy en día con la increíble variedad de salas de poker que hay, y las nuevas modalidades de juego rápido o cash, puedes ganar dinero tranquilamente desde tu casa haciendo sesiones diarias de no mas de dos horas.
Puedes jugar por la mañana un par de horas, luego tres mas por la tarde y rematar con un par o tres horas de noche. Con eso consigues no tener que trasnochar, poder ir a comprar, tomar algo con los amigos e incluso hay quien tiene una vida familiar…
La idea es fácil. Metes volumen, utilizas partidas de pocos jugadores tipo Spingo, aprovechas el rake de la sals y utilizas tus habilidades y la reducción de varianza acumulada de un torneo para sacarle el máximo provecho a tu dinero.
Ahora bien. ¿Nos conformamos con eso?
Yo personalmente lo tengo claro. Se que va a ser un camino muy duro. Se, que un torneo, son muchas horas seguidas, que las posibilidades de runear bien tres flips seguidos va a ser casi imposible.
Pero doctores, por dios, ¿quien no recuerda a Ulises, Leónidas, Skywalker o el mismísimo Bokesponja?
¿Porque los recuerdas? ¿Los recuerdas por haber sido muy cautos? ¿Los recuerdas porque se quedaron en casa esperando que llegara el fin de la batalla?
No amigos, no. Los recuerdas porque no tuvieron miedo a la batalla que estaba por llegar, porque no pensaron ni un segundo que seria imposible. Porque no tuvieron reparo en exprimir sus habilidades, cargarse de coraje y buscar la victoria por individual. Lucharon, sufrieron, atizaron fuerte, se defendieron, buscaron las debilidades de su enemigo y explotaron sus propias ventajas, ¡hasta la VICTORIA!
¡Yo personalmente lo tengo claro!
Quiero ser “NEO”, liberar matrix, salvar el planeta y que me bese el culo el agente “Smith”. Asi que escojo la pastilla azul, pago la entrada.
Preparar las mesas. Traer las cámaras. Retransmitir en directo. Llamar a los amigos de Club poker magazine, y preparar el trofeo.
No va a ser fácil, no va a ser rápido, no va a gustarte, pero señores, ¡¡¡¡esto es Poker!!!!
